Guía en reloj para el cambio de postura de pacientes y la prevención de úlceras por presión
Prevención de las úlceras por presión: cambio de posición del paciente
Las heridas crónicas son aquellas que no consiguen continuar con la evolución esperada de cicatrización de forma ordenada y oportuna para volver a establecer la integridad normal de la piel. Las úlceras por presión son un tipo de herida crónica que puede no lograr cicatrizar debido a factores intrínsecos y extrínsecos. Es importante eliminar los factores que contribuyen a la cronicidad de las heridas como las úlceras por presión. Además, es necesario tomar en cuenta la condición clínica del paciente y vigilar la nutrición a fin de optimizar la cicatrización de la herida.
Las úlceras por presión no cicatrizarán pese al mejor tratamiento a menos que se tome en cuenta la reducción de la presión. A continuación te presentamos una simple guía para implementar cambios de postura que ayuden en la prevención de las úlceras por presión en pacientes en cama:
Considera los siguiente al tratar a pacientes inmovilizados por largos periodos:
La movilización y brindar una adecuada posición al paciente es importante en todas las superficies. Se debe considerar lo siguiente al tratar a los pacientes que permanecen inmovilizados por periodos de tiempo prolongados:
- Prevenir atelectasias y neumonía girando a todos los pacientes.
- Las almohadas de la cama en el área en donde va la cabeza no deben de ser colocadas en un ángulo superior a los 30 grados por períodos prolongados de tiempo, siempre y cuando esto sea compatible con las metas del cuidado del paciente. Una angulación excesiva producirá fuerzas de cizalla en las regiones sacra e isquiática, lo que puede contribuir a la formación de una úlcera.
- Se debe alentar a los pacientes en silla de ruedas a cambiar de posición tan frecuentemente como sea posible, cada 15 minutos como mínimo. Si no son capaces de mover su propio peso, no deben permanecer sentados por más de una hora.
- Se debe movilizar a los pacientes encamados cada dos horas como mínimo. Los pacientes con alto riesgo requieren ser reposicionados con mayor frecuencia. Tenga en mente que las primeras investigaciones sobre la presión y las consiguientes ulceraciones fueron llevadas a cabo en voluntarios jóvenes y sanos. Los pacientes gravemente debilitados pueden desarrollar lesiones en un periodo de tiempo menor a lo esperado y pueden requerir cambios de posición con mayor frecuencia.
- Los pacientes no deben ser posicionados directamente sobre una úlcera.
- Los pacientes no deben ser “girados” totalmente de un lado a otro. En lugar de esto, requieren ser posicionados a 30 grados en decúbito lateral.